Al recibir un cachorro en casa es fundamental que comencemos cuanto antes a enseñarle a hacer sus necesidades en un sitio adecuado. Los accidentes son normales y pueden ocurrir al principio, así que hay que tener paciencia y darles tiempo para su adaptación. Algunos cachorros se adaptan con bastante rapidez y otros pueden necesitar más tiempo y apoyo.
Si pasado un tiempo sigue haciendo sus necesidades en casa puede ser una muy buena ocasión para pedir opinión a nuestro veterinario, hacer un chequeo y descartar cualquier problema médico. Pero antes de ello, ¡tenemos que intentarlo! Estos son algunos consejos para enseñar a tu perro a hacer sus necesidades fuera de casa.
Algunas veces no llegaremos a tiempo y nos daremos cuenta demasiado tarde, pero si estamos atentos podemos adelantarnos si vemos que nuestro cachorro hace alguna de las siguientes cosas:
Algunas de las señales serán más obvias que otras, así que no te preocupes si no las percibes siempre.
Si hace sus necesidades en casa, mantén la calma y límpialo sin dramas. Puedes utilizar limpiadores enzimáticos o detergente con agua tibia. Recomendamos no utilizar desinfectantes domésticos ya que contienen amoniaco.
Recuerda que no debes castigar a tu cachorro si hace sus necesidades de forma accidental en casa, dale tiempo y evita que ese momento sea traumático para él.
Conocer el tipo de superficie que prefiere tu perro para hacer sus necesidades te ayudará en el entrenamiento. Aunque parezca raro, tienen sus preferencias y algunas son:
Recuerda que el objetivo es entrenar a nuestro cachorro para que haga sus necesidades fuera de casa, y por lo tanto debemos asegurarnos de ofrecerle las salidas suficientes para que pueda hacerlo y adaptarse a la nueva rutina.
La constancia es fundamental para establecer buenos hábitos. Una rutina le ayudará a desarrollar confianza, acostumbrarse a los horarios de salida y reducir los accidentes en casa.
Que tu cachorro asocie salir a la calle con hacer sus necesidades no será fácil ni inmediato. Si al salir solo quiere jugar y está distraído descubriendo el nuevo mundo, trata de «ignorarle». Probablemente se aburra y consiga hacer sus necesidades.
Y recuerda estar atento a las señales para salir a la calle lo antes posible.
Es importante comunicarle que lo ha hecho bien. Pero cuidado con las golosinas, ya que pueden interpretar que ir al baño en cualquier lugar les traerá recompensa.